04/11/2020 Publicación en Facebook
Periodista y locutor de radio, premiado por la Sociedad Geográfica Española. A lo largo de su carrera ha colaborado con medios como Radio Popular, Radio Euskadi, Euskal Telebista y Televisión Española. También ha escrito para los periódicos Diario Vasco, Deia, Egin y Gara. Especializado en periodismo sobre viajes y aventuras, su trabajo al frente de programas de radio y televisión como “Doctor Livingstone, supongo”, “Levando anclas”, “La casa de la palabra” o “Tierra a la vista” le han convertido en un referente en el ámbito de los viajes, especialmente en Euskadi. El programa “Levando anclas”, en antena desde 1984, es uno de los más veteranos de la radio pública vasca. A lo largo de los años, por sus diferentes programas han pasado infinidad de personas, todas ellas muy interesantes por las actividades en las que han destacado.
De su mano, he grabado dos entrevistas sobre Appalachian para “Levando anclas” y “La casa de la palabra”. Quizá os haya llamado la atención el original nombre de este último programa.
Explico su origen: En uno de sus viajes por África, más concretamente por Guinea Ecuatorial, Roge pudo observar que las aldeas disponían de un lugar específico donde acudir, para informar o dirimir todo tipo de cuestiones que afectaran al resto de componentes de la tribu. Ese lugar era conocido como “La casa de la palabra”, un espacio que no pasaba de ser una pérgola techada con ramas de árbol. Con toda la tribu reunida bajo el edificio, quien lo deseara podía expresar su opinión sobre cualquier cuestión, algo que le pareció tan bonito y a la vez extraordinario que decidió rotular su programa con ese nombre.
Os dejo varias fotografías; una de ellas con mi querido amigo Roge, a quien una vez más agradezco su apoyo.
Explico su origen: En uno de sus viajes por África, más concretamente por Guinea Ecuatorial, Roge pudo observar que las aldeas disponían de un lugar específico donde acudir, para informar o dirimir todo tipo de cuestiones que afectaran al resto de componentes de la tribu. Ese lugar era conocido como “La casa de la palabra”, un espacio que no pasaba de ser una pérgola techada con ramas de árbol. Con toda la tribu reunida bajo el edificio, quien lo deseara podía expresar su opinión sobre cualquier cuestión, algo que le pareció tan bonito y a la vez extraordinario que decidió rotular su programa con ese nombre.
Os dejo varias fotografías; una de ellas con mi querido amigo Roge, a quien una vez más agradezco su apoyo.
Un abrazo
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